Proteger a nuestra familia tiene que ver con una buena higiene. Aunque nos lavamos las manos todos los días antes y después de ir al sanitario, antes de la hora de dormir o cuando llegamos a casa después de un día pesado, puede que no lo estemos haciendo bien.
Para tener buena salud es necesario aprender a lavarnos las manos correctamente para enseñarle al resto de la familia.
Primero hay que mojar las manos con agua, asegúrate de cerrar bien la llave. Pon las gotas necesarias de jabón para lavar tus dos manos, en el caso de tener un jabón líquido. Si es barra, frótala entre tus manos alrededor de 5 segundos.
Frota las palmas de tus manos entre sí. Con la palma de la mano derecha frota el dorso de la mano izquierda entrelazando los dedos. Después has el mismo procedimiento con la otra mano.
Frota las palmas de tus manos con los dedos entrelazados, después talla los dedos y uñas entrelazándolos. Los dedos pulgares se lavan con un movimiento de rotación de la mano. Con la punta de las manos te lavas la palma izquierda y viceversa.
Seca perfectamente tus manos para que no queden rastros de jabón. Toma una toalla desechable para cerrar la llave del agua y deséchala. Toma una más para secar perfectamente tus manos.
Ahora sí, tus manos están perfectamente limpias, asegúrate de enseñarles la técnica a todos los miembros de la familia.
¡Cuida tu salud y la de ellos!
Fuente: Kids Health, Medline Plus-Biblioteca Nacional de Medicina de E. E. U. U.